El nombre del Estado se deriva de Tamaholipa palabra de origen Huasteco, donde el prefijo tam- significa “lugar donde”. Aunque no existe un acuerdo del significado de holipa, parece ser que la interpretación más común es “rezar mucho”, lo cual significa “lugar donde se reza mucho”.
Durante el periodo colonial temprano, uno de los pueblos originales de Tamaulipas, hoy extinto, era conocido como los “Santos”, en lo que parece una hispanización del término holipa.
Tamaulipas posee una superficie equivalente al territorio combinado de Bélgica y Holanda o El Salvador y Costa Rica. Es atravesada por el Trópico de Cáncer al sur de la capital, Ciudad Victoria, y el clima varía de acuerdo a la zona; en el sur y sureste es húmedo, en el altiplano y serranías es seco y en el centro y noroeste es semi-cálido, con lluvias escasas; la temperatura media de Matamoros en enero (15 °C) y en julio (28,5 °C), de Tampico en enero (18 °C) y en julio (28,5 °C).
La precipitación anual promedio es de 891 mm y la humedad relativa promedio es de 67,5 %. Sus principales ríos son el río Bravo, el río Conchos, el río Purificación y el río Guayalejo, los cuales fluyen de poniente a oriente y desembocan en el Golfo de México. Tamaulipas tiene un total de 16 presas, siendo la Vicente Guerrero (3.910 millones de m³) la más grande del estado.
El 58% del estado presenta clima cálido subhúmedo, el 38% presenta clima seco y semiseco en el centro, el norte y hacia el suroeste del estado; el 2% es templado subhúmedo en la región suroeste, y el restante 2% presenta clima cálido húmedo localizado hacia el suroeste.
La temperatura media anual es alrededor de 23.5°C, la temperatura máxima promedio es de 22°C y se presenta en los meses de junio a agosto, la temperatura mínima promedio es de 10°C y se presenta en el mes de enero.
Entre sus platos típicos hay que destacar el cabrito al pastor, cabrito al horno, parilladas, gorditas rellenas, tamales de cerdo, asado de puerco, carne asada a la tampiqueña, carne seca con huevo.
Además se elaboran excelentes platos con pescados y mariscos como los cebiches, sopas de mariscos, las jaibas rellenas, salpicón de jaiba, camarones elaborados de muy diferentes maneras como por ejemplo escabeche de camarón o camarones en su jugo, además de los pescados anteriormente nombrados, la negrilla, róbalo y huachinango.
Para el ecoturismo la Reserva de la Biosfera. El Cielo se convierte en un paraje de 144,530 ha., perfecto para aventurarse, ya sea para acampar, hacer recorridos en bicicleta de montaña u observar la flora y fauna.
Sus Ciudades aún conservan la placidez de la provincia empezando por Ciudad Victoria, la capital a pesar de su dinámica actividad comercial; el Puerto Industrial de Altamira goza de solitarios litorales que invitan a recorrerlas; San Fernando y su Hacienda Las Palmas, que cuenta con el Rancho Cinegético de mayor importancia en el País; al margen del río Bravo, la riqueza arquitectónica y el puerto de gran actividad de Matamoros; la modernidad y paso comercial que es Reynosa; Nuevo Laredo y su conservada fisonomía estilo neocolonial.
Pueblos mágicos: Mier, Tula
Otros atractivos: Templo de la purisíma concepción, El Museo de los Frijoles Pintos; los puentes de Juan Méndez, San Juan e Hidalgo, la Casa
de la Cultura, junto a la Capilla de San Juan Bautista,la Casa de Justicia Mayor, Iglesia de San Antonio de Padua, Casa Minerva, Ruta de los Cenotes de Aldama, Cañón El Salto, Bernal de Horcasitas, Camino real de Tula y el mirador, Bosques de Miquihuana, Troncones, Zona arqueológica el Sabinito, Prámides de las Flores, Trajineras de Llera, El Nacimiento, Grutas La Cueva, Centro interpretativo Ecológico,
Playas: Bagdad, Miramar, La Pesca, Barra del Tordo, Tesoro, Carbonera.